Tras la puerta del poder

 

Roberto Vizcaíno

Normalmente pausado, tranquilo, reflexivo, Ricardo Monreal se sorprende al enumerar una a una las reformas en puerta que suman un total de 10, las mismas que deberán ser tramitadas por él en los siguientes 3 meses, y que le requerirán negociaciones y acuerdos para cada una.

Con voz lenta, un tato ensimismado, dice más para sí que para los reporteros que le seguimos atentos en la mesa redonda de su despacho:

“Es pesado, no es fácil, porque es de acto por acto. Cada reforma constitucional requiere una negociación particular y, es muy desgastante, es muy pesado… pero vamos a intentar hacerlo”.

La conversación con el coordinador de los senadores de Morena y presidente de la Junta de Coordinación Política se inicia con el tema de la Guardia Nacional.

La creación de este cuerpo militarizado es hoy su preocupación principal. Sus comentarios indican que enfrenta resistencias, fuertes, de carácter partidario, ideológico, por suspicacias de sectores y grupos, e intereses, poderosos intereses.

En obvio mensaje a todos ellos advierte que su mayoría legislativa formada por las bancadas de Morena, del Pes y del PT ya se comprometieron a aprobar el dictamen que contempla la creación de la Guardia Nacional.

Pero sabe que como es reforma Constitucional, requiere mayoría calificada, es decir unos 17 votos más de los que suman los senadores de su alianza.

A esos posibles votos les dice que el país vive una emergencia nacional, como nunca antes, frente a la violencia y la inseguridad y que no hay que perder el tiempo para aprobar la Guardia Nacional.

Dice sin embargo estar consciente de que detrás de esa aprobación existen muchos escollos, dudas, resquemores, pero advierte que, como toda reforma constitucional, esta podrá ser perfectible o modificable.

Monreal buscará hoy y mañana que los otros grupos parlamentarios aprueben su plan para sacar adelante a la Guardia Nacional. ¿Cuál es su plan?

Explica: va a proponerles a los otros coordinadores que los secretarios de la Defensa, Marina, Seguridad Pública y el Fiscal General de la Nación comparezcan ante la Comisión de Puntos Constitucionales antes de que en su seno se debatan las modificaciones y adhesiones a la minuta que crea la Guardia Nacional aprobada ya por los Diputados.

Sería un ejercicio inédito, afirma. Nunca antes realizado. Que serviría para que los miembros de la comisión avancen rápido en el dictamen y que se pueda este debatir y aprobar en un período extraordinario que se realizaría el viernes.

La realización del extraordinario se tramitaría y aprobaría en la sesión semanal de la Comisión Permanente.

Todo en 3 días.

Monreal afirma que sabe que es complicado, difícil, que no todos están de acuerdo en este plan, que hay resistencias.

 Pero aclara que desde fines de la semana pasada él ha conversado ya con no pocos senadores de la oposición, quienes podrían aceptar este trámite de 3 días.

Se trata, insiste, en darle todo el apoyo al Presidente Andrés Manuel López Obrador en su intento por pacificar al país y proteger a las Fuerzas Armadas con un respaldo constitucional en sus tareas de seguridad.

“Nosotros (los senadores de Morena, PES y PT) estaríamos dispuestos a ir a un extraordinario esta semana, por la urgencia, porque no puede regatearse y no se puede entrar a recesos cuando la nación está en grave peligro”, subraya.

LAS OTRAS REFORMAS

Lo anterior es lo urgente, lo igualmente importante pero no inmediato, es, dice, lo que se tramitará en el segundo período que inicia el 1 de febrero y termina el último de abril.

“En el caso del ordinario, inevitablemente, necesariamente tendremos que abordar varios temas, algunos incompletos: revocación de mandato; fuero constitucional; ley de confianza ciudadana; reforma educativa, donde actuamos como Cámara revisora. También reformas en materia laboral, que ingresaron a la Cámara de Diputados.

“Y aquí (en el Senado) tenemos dos importantes: el sistema anticorrupción y el de la despenalización del uso de la marihuana…

 ¿Ley minera?, se le inquiere.

“No está contemplada. Hay una iniciativa, en efecto, pero no está contemplado como prioridad.

“Estas seis, y le agregaría una, es un interés personal pero que a veces no me gusta repetirlo, lo de las comisiones bancarias”.

Rápido recuerda otras. Como la de Consulta ciudadana, que requerirá de la modificación del artículo 35º constitucional.

Y a eso agrega la de modificaciones a leyes reglamentarias a la Ley Orgánica del Poder Judicial, que tiene que ver con la rotación de jueces.

“También ese tema lo vamos a tratar… ya hemos platicado de manera informal o formal, con el nuevo presidente de la Corte que vamos a abordarlo en los próximos días.

“Es decir, tenemos una agenda impresionante, pesada, difícil, que va a requerir de mucha paciencia y de mucha prudencia; porque la mayoría de ellas son construcción de reformas constitucionales que requieren de mayorías calificadas”.

Las que requieren de mayoría calificada por ser constitucionales, es decir, las dos terceras partes de votos de los 128 senadores, son:

La creación de la Guardia Nacional, la reforma de fuero constitucional; reforma educativa; Consultas ciudadanas; Revocación de mandato; despenalización de la Marihuana y Reforma laboral.

Entonces, son 7-3; 7 reformas constitucionales, 3 reformas legislativas por la vía secundaria o la vía reglamentaria.

Todo a tramitarse entre febrero y abril.

FUERON PRUDENTES

Fuera del tema principal, pero absolutamente vigente por lo acontecido el viernes en Tlahuelilpan, Hidalgo, Monreal consideró que el Ejército actuó con prudencia ante el desbordamiento de los pobladores.

“Ya me imagino si el Ejército hubiera actuado reprimiendo o a toda costa, deteniendo la expresión popular. ¡Ya me imagino!, estuviéramos ahora en el banquillo de los acusados, en Tribunales internacionales.

“No, yo creo que el Ejército actuó prudentemente. Por eso es importante darle instrumentos jurídicos, constitucionales, a las Fuerzas Armadas, para aplicar protocolos, que ahora no los tiene y tampoco tiene capacidad jurídica para hacerlos, dado que está prohibida la participación del Ejército, las Fuerzas Armadas, en asuntos de seguridad pública”, indicó.

TRACALAS EN RADIO CENTRO

Representantes de Francisco Aguirre, propietario de Radio Centro, echaron la tarde de ayer a la calle a 97 trabajadores de esa empresa sin darles liquidación alguna bajo el argumento de que se había declarado la quiebra o banca rota del consorcio que afirma tiene la mayor audiencia de la radio en México.

Voz de los despedidos, la reconocida conductora Talina Fernández discutió con los representantes de Aguirre a quienes reclamó el compromiso de la liquidación al tiempo que lanzó una petición de auxilio de parte de los medios ante la evidente arbitrariedad.

Aguirre, quien desde hace algunos años ha llevado a Radio Centro al fracaso, luego de que entró en la licitación de un canal de TV abierta y luego no tuvo dinero para continuar con el trámite, y con ello perder varios millones de pesos, contrató hace unos meses a Carmen Aristegui y hace unas semanas a Julio Hernández, columnista de La Jornada con salarios millonarios y reestructuró su barra noticiosa en la que mantiene a Sergio Sarmiento.

Radio Centro mantiene un diferendo desde hace años con Gutiérrez Vivó a quien no ha querido pagarle 23 millones de dólares.

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