Acertada la participación de México en solución al conflicto de Venezuela mediante “Mecanismo de Montevideo”: Mario Delgado
• El coordinador parlamentario de Morena respaldó al canciller mexicano Marcelo Ebrard, quien junto con otros diplomáticos han suscrito un plan para mediar pacíficamente en Venezuela.
• Saludó la postura del canciller Marcelo Ebrard Casaubón asumida en el marco de la Reunión del Grupo Internacional de Contacto (GIC), donde reiteró la posición de México de que por mandato constitucional no se puede apoyar la injerencia política ni participar en algo que implique determinar el proceso electoral en otros países.
Ciudad de México,10 Febrero (MENSAJE POLÍTICO/CÍRCULO DIGITAL).-Mario Delgado Carrillo, coordinador de los diputados federales de Morena, respaldó la participación del gobierno de México en el proceso denominado “Mecanismo de Montevideo”, con el cual se privilegia la diplomacia sobre las demás alternativas, para alcanzar la paz y la estabilidad de manera sostenible, legítima y efectiva en Venezuela.
“Es valiosa la posición del gobierno mexicano, porque más allá de ponerse de un lado o del otro, como ocurre en la comunidad internacional, México ha decidido adoptar un posicionamiento responsable, inteligente, porque está pensando en una posible ruta de salida a través del diálogo, la negociación, el respeto a la autonomía de los pueblos y la protección de los derechos humanos”, subrayó.
Asimismo, consideró que la participación de los gobiernos de México, Uruguay y de los países de la Comunidad del Caribe (CARICOM), en atención al llamado del secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, debiera considerarse como una vía para abordar la compleja situación que prevalece en Venezuela, a través del diálogo para la negociación, desde una perspectiva de respeto al derecho internacional y a los derechos humanos.
Delgado Carrillo coincidió en que la posición histórica de las naciones que participaron en la elaboración del “Mecanismo de Montevideo” han privilegiado siempre la diplomacia sobre las demás alternativas, ya que sólo así se podrá alcanzar la paz y la estabilidad de manera sostenible, legítima y efectiva.
“Queremos ofrecer todo nuestro respaldo al gobierno de México, al canciller Marcelo Ebrard Casaubón, con esta propuesta de diálogo de respeto a la autonomía de los pueblos y para evitar la violencia”, destacó Delgado Carrillo.
Recordó que el “mecanismo de Montevideo” es una iniciativa que se pone a disposición de los actores venezolanos como una alternativa pacífica y democrática para privilegiar el diálogo y la paz, así como fomentar las condiciones necesarias para una solución integral, comprehensiva y duradera.
El pasado miércoles 6 de febrero, los cancilleres Rodolfo Nin Novoa (Uruguay) y Marcelo Ebrard (México) se reunieron y presentaron un proceso con cuatro fases: Diálogo Inmediato, Negociación, Compromisos y Materialización de los compromisos asumidos en la fase previa, con el acompañamiento internacional.
Mario Delgado dijo que esta decisión del gobierno de México es congruente con nuestra Constitución. “Es una posición estratégica e inteligente ante lo que ocurre en Venezuela, porque más allá de colocarse de un lado o del otro, lo que está ofreciendo es una ruta de salida, pensar en la ruta de salida en el conflicto de Venezuela es muy valiosa la propuesta que están haciendo con el mecanismo”.
De igual forma, el coordinador parlamentario también saludó la postura que el canciller Marcelo Ebrard Casaubón asumió en el marco de la Reunión del Grupo Internacional de Contacto (GIC), donde declaró que México, por mandato constitucional no se puede apoyar la injerencia política en otros países. No podemos participar en algo que implique que nosotros determinemos el proceso electoral.
Si bien, el Grupo Internacional de Contacto -que se llevó a cabo el siete de febrero de 2019 en Uruguay-, donde acudió Ebrard Casuabón, resolvió pedir la celebración de elecciones libres en Venezuela, Mario Delgado celebró que México en dicho encuentro haya reiterado su postura planteada a través del Mecanismo de Montevideo, donde no se establecen condicionamientos y se pone por delante del diálogo y el respeto hacia ambas partes.