En sólo una semana, todos los retos para AMLO

En sólo una semana, todos los retos para AMLO

Índice Político

FRANCISCO RODRÍGUEZ

Para esa abogada tan especial…

Entre discusiones bizantinas, reyertas al interior del gabinete presidencial, controversias jurídicas y constitucionales y la puja por rescatar al régimen de uno de los mayores descréditos de su corta historia, el público presencia el alcance y el sentido de su voto mayoritario, integral y masivo otorgado el primero de julio de 2018.

Las discusiones bizantinas, como aquéllas del famoso Concilio que no atinó en descubrir el sexo de los ángeles, se dieron alrededor de los encontronazos entre miembros del gabinete que se vieron inodados entre las razones que apoyaron la renuncia de Carlos Urzúa.

Unos a favor de la redacción moderada neoliberal para oponerse a excesivos recortes de personal, destino de grandes cantidades a las obras emblemáticas del lopezobradorismo, rescate de migrantes a petición de Donald Trump, apuntalamiento a pesar de todo al proyecto sexenal Pemex, se quedaron ponchados en la registradora del pitcher principal.

Otros, en favor de la obcecada austeridad republicana, los gruesos flujos al Tren Maya, la refinería de Dos Bocas, el cumplimiento absurdo de las condiciones estadounidenses para apoyar el T-MEC y la no imposición de aranceles a productos de exportación, triunfaron en toda la línea. A pesar del tropiezo del acero.

Los perros viejos del lopezobradorismo engulleron a los diletantes

Resultado: la primera víctima mayor de la política económica, Carlos Urzúa, adquiere tintes de grandeza frente a la desorientada clase media y los tambores imperiales de los medios de comunicación ‎que lo suben a los altares aunque se haya quedado en el desempleo. Ponen su bota sobre él casi todos los preferidos.

Rocío Nahle, la jefa del proyecto energético de salvación de Pemex; Alfonso Romo, encargado de calmar las ansias de la iniciativa privada; Julio Scherer, siempre del lado del vencedor, y hasta Marcelo Ebrard, el que más sabe de capotear desenlaces palaciegos. Los perros viejos engulleron a los diletantes.

La solución: parar el robo diario de un millón de barriles de crudo

Discusiones bizantinas porque el meollo del debate no se encuentra entre la restricción y la soltura del gasto, entre el Plan Nacional de Desarrollo y los objetivos de la Cuarta Transformación, entre obras emblemática o no. El centro sigue siendo la cantidad que se requiere para elevar la productividad petrolera.

Y aunque no lo quieran aceptar la solución es más simple de lo que parece. Sólo se requiere que el régimen de la Cuarta Transformación endurezca el músculo y las posiciones para acabar de una vez por todas con el robo inmisericorde de un millón diario de barriles de crudo que Romero Deschamps, Salinas, Peña y sus socios llevan a cabo en las plataformas y boyas marítimas del Golfo de Campeche.

Por sí sola, esta acción valiente llevaría al país a elevar diariamente la producción, llegando a los 2.7 millones diarios de barriles que se requieren para poder liberar sus angustias, aflojar las alforjas de los financieros, embozar a las calificadoras, solucionar el costo de todos los programas sociales de López Obrador y marcar la ruta latinoamericana.

Vesania y poco respeto a la ley de los juzgadores en nuestro país

Las controversias jurídicas y constitucionales se originan en ‎el campo de batalla de los abusivos del patrimonio nacional. Muchos lo hemos dicho en todos los tonos: los jueces corruptos que otorgan suspensiones definitivas y amparos a Emilio Lozoya Austin y a Carlos Romero Deschamps incurren en un imperdonable prevaricato.

Ningún juez, de la categoría que sea, tiene derecho a amparar con las garantías constitucionales a quien ha cometido un delito grave, el que pone en entredicho la salvaguarda de los intereses superiores de la Nación. El amparo concedido sólo serviría como boleto para sentarse a declarar ante un ministerio público competente de la causa.

Esa multitud de amparos promovidos y obtenidos todos los días por Romero Deschamps ante todos los jueces del país, lo único que descubre es la vesania y el poco respeto a la ley que tienen los juzgadores. Las dudas jurídicas se despejarían de una sola lectura a la Constitución y sus leyes reglamentarias.

En Baja California, De la Vega quiere impunidad cueste lo que cueste

Como nadie llora si le dan pan, Jaime Bonilla, el morenista converso se ha dejado apapachar por las mayorías mercenarias del PAN, PRI, Convergencia y PRD, en el Congreso y en los cabildos municipales de Baja California para lograr la prolongación de su mandato, tres años más de lo proyectado.

¡Cosas veredes, mío Cid!, los favores han provenido de un espantado Kiko de la Vega, quien quiere impunidad a cualquier costo, aunque éste insista en avasallar a los partidos de oposición, hoy mayoría en su territorio, que se rinden sin batallar ante el empuje morenista. El desenlace depende nuevamente de lo que diga el dedo más grande de esa estofa.

El plazo de Estados Unidos para que le entreguen la cabeza de EPN

Era previsible que, de continuar esta serie de yerros y un escenario de desempleo y de catastrofismo económico, la Cuarta Transformación estaba a punto de fallecer antes de haber nacido. Hace unos días, López Obrador registró una baja de 40 puntos de aprobación ciudadana. Así como iba, podía acabar el veranillo con veinte puntos totales. Un naufragio.

‎Todos se le habían volteado. Hasta en el seno de Morena se presentaron graves discrepancias sobre el liderazgo que podrían haber acabado como el rosario de Amozoc. Nadie se ponía de acuerdo sobre el perfil de la heredera ya designada, la esposa del abusivo Arturo Alcalde Justiniani, verdugo de la clase obrera del país.

Yo no sé si fue a partir del conjuro de aquél mensaje del Departamento de Estado y de los fiscales estadounidenses que hace veinte días le dio al nuevo régimen de la 4T la oportunidad de hacer justicia sobre la cabeza de Luis Videgaray, Peña Nieto y ad lateres, dentro de cien días, a partir de los cuales, si no actuaba…

… ellos vendrían personalmente y se los llevarían en cuerda hasta los banquillos de la justicia gabacha. Merecido final para nuestros tigrillos de Tacubaya. ‎Empinados todos y sentenciados desde aquél famosos juicio de Brooklyn al Primer Fiscal mexicano, su excelencia, El Chapo Guzmán.

De a pechito el caso Juan Collado, abogangster de los depredadores

Yo no sé si haya sido la violación obscena del acuerdo de impunidad –si es que existió– entre AMLO y EPN, porque éste haya violado públicamente la prudencia, moderación y cordura aplastadas en las fiestas faraónicas y la muestra del palmito con las y los amigos en la España abigarrada.‎ Que haya montado en cólera el tabasqueño en defensa de su natural resentimiento.

El hecho es que apareció de a pechito el caso Juan Collado, el abogangster de todos los depredadores, su Caja Libertad, una llave maestra hacia paraísos fiscales y lavado de todo tipo de monedas. El que puede empinar a Salinas, Zedillo, Fox, Calderón, Peña Nieto y alrededores porque sabe de sobra lo que está en juego. Y ahí sí no va a haber amparos que valgan.

El caso es que la sola mención de poder tener en las manos a esos mamarrachos, puede operar el milagro de enderezar la nave, de saltar la vara, de retomar el liderazgo latinoamericano y de enseñar el músculo del Estado que tanta falta hace para darle credibilidad y aprobación ciudadana al nuevo régimen, a punto de reventar.

¿Realidad los reclamos del pueblo de México por obtener justicia?

Por eso la política es un juego de espejos fascinante. De agonizar en el establo, el caballo vuelve a estar en el arrancadero. Pero ahora sabe que si no gana la primera y hasta una trifecta, puede perder el favor de los apostadores y del público.

Ojalá se hagan realidad los reclamos del pueblo de México por obtener justicia. Porque si esto resulta una simple matrushka, es fácil adivinar dónde acabará el régimen de la 4T.‎ El problema es que el país puede ser arrastrado a ese basurero.

¿No cree usted?

Índice Flamígero: Vía Cuadrante, la empresa del consultor Gerardo Soriano, acuso recibo de la encuesta del Gabinete de Comunicación Estratégica en cuya síntesis se lee que “… nueve de cada 10 personas consideran que deben citarse a declarar al ex presidente de la República Enrique Peña Nieto, y a los ex secretarios de Hacienda y Energía, Luis Videgaray y Pedro Joaquín Coldwell, respectivamente. Al plantearle a los encuestados el motivo por el que aún no han sido llamados a rendir testimonio los tres ex funcionarios, poco más del 60% de los encuestados opinan que porque el actual Gobierno los está encubriendo; el 13% dijo que porque no son relevantes sus declaraciones para la investigación; y un 4% señala que porque hay corrupción/negociación política de por medio… También se sondeó la opinión sobre los tres ex funcionarios, arrojando que más del 70% tiene una percepción de mala a muy mala del ex presidente Peña Nieto; 34% opina lo mismo de Videgaray y 19% del ex secretario de Energía.”

https://www.indicepolitico.com / indicepolitico@gmail.com / @IndicePolitico / @pacorodriguez

TAGS
Share This