Comienza rescate de pasajeros de crucero anclado en costas de Panamá
El buque Rotterdam recibirá a 401 pasajeros asintomáticos de crucero Zandaam, anclado frente a las costas de Panamá, en el que murieron cuatro adultos en medio de un confinamiento abordo, donde dos personas dieron positivo de COVID-19.
El trasbordo se realizará en el marco de una operación barco a barco para abastecimiento de suministros y combustible que comenzó este viernes y que continuará este sábado en un sector del litoral del Pacífico panameño, informó la Autoridad Marítima de Panamá.
Hasta la medianoche de este viernes se estaba realizando la transferencia de insumos médicos y demás materiales solicitados, desde el buque Rotterdam hacia el crucero Zandaam, esta acción se reanudará a tempranas horas del sábado 28 de marzo, indicó la autoridad marítima.
Bajo la supervisión de funcionarios de la Autoridad Marítima de Panamá (AMP), se realizó la transferencia de insumos médicos y de personal de salud, que había llegado en otro crucero de Holland America, (el M/S Rotterdam), anclado a ocho millas náutica de la costa panameña, en las afueras de isla Taboga.
El gobierno panameño negó al crucero Zandaam, con mil 243 pasajeros y 586 tripulantes, el tránsito por el Canal de Panamá por razones de “salubridad”, de acuerdo con el diario local La Prensa.
En un comunicado, la naviera informó que 138 personas han mostrado síntomas de gripe, de las cuales 53 son pasajeros y el resto personal de la embarcación.
La naviera propietaria del Zandaam anunció el viernes la muerte a bordo de cuatro pasajeros “de nacionalidades estadounidense, sueco, inglés y holandés” y dijo que los “cadáveres se mantendrán abordo de la nave y serán desembarcados al llegar a su destino”.
El administrador del Canal de Panamá, Ricaurte Vásquez, dijo que el Zandaam estaba en “cuarentena” en un área destinada para ello, después de que el Ministerio de Salud panameño “no dio el permiso” para transitar por la vía interoceánica.
El buque MS Zandaam partió de Buenos Aires (Argentina) el pasado 7 de marzo y navegaba por el Pacífico rumbo a Port Everglades (Florida) con todos los pasajeros aislados y sin posibilidad de tocar puerto, después de ser rechazado en varios puertos latinoamericanos por sospecha de que hay varios de los pasajeros con COVID-19.