Arquidiócesis solicita estudio a estructura de Catedral Metropolitana
Ciudad de México, 10 de Septiembre (MEXIQUEÑO/CÍRCULO DIGITAL).-El director de la Comisión de Arte Sacro de la Arquidiócesis de México, padre José de Jesús Aguilar, solicitó al gobierno federal que se hagan estudios completos a la estructura de la Catedral, a fin de conocer su solidez y garantizar la seguridad del inmueble durante las fiestas patrias.
Ciudad de México, 10 de Septiembre (MEXIQUEÑO/CÍRCULO DIGITAL).-El director de la Comisión de Arte Sacro de la Arquidiócesis de México, padre José de Jesús Aguilar, solicitó al gobierno federal que se hagan estudios completos a la estructura de la Catedral, a fin de conocer su solidez y garantizar la seguridad del inmueble durante las fiestas patrias.
En entrevista, resaltó que después del sismo del 19 de septiembre de 2017, mil 850 templos católicos de todo el país resultaron con daños, entre ellos, la Catedral Metropolitana, que tuvo afectaciones en las torres de los campanarios.
“Hay cosas que dañan al edificio que no se pueden evitar, como el paso del tiempo y los sismos, pero hay otros elementos que sí pueden detener su deterioro. Concretamente la cercanía de las fiestas patrias, hay dos puntos en los que se debe poner especial atención: el toque de campanas y la pirotecnia”, expresó.
En el artículo titulado ¿Está lista la Catedral para las fiestas patrias?, difundido por el semanario “Desde la Fe”, órgano oficial del Arzobispado, el sacerdote aseguró que si bien los campanarios fueron hechos para que se tocaran las campanas, esto se debe hacer cuando están en óptimas condiciones.
“Antes del sismo podía hacerse el repique completo de todas ellas sin problemas, pero a raíz del temblor las torres sufrieron daños estructurales que, de acuerdo con la Dirección General de Sitios y Monumentos, de la Secretaría de Cultura federal, pusieron en riesgo su solidez”, añadió.
Indicó que el 17 de agosto, a casi un año del sismo, comenzaron a inyectar un material en las dovelas, es decir, la parte superior del arco campanario.
“Sin embargo, esto tarda en secar unos 20 días, por lo que si en esta ocasión las autoridades federales pidieran un toque de campanas, primero tendrían que hacer un estudio profundo para ver si ya secó el material inyectado”, expresó.
En segundo lugar, “para saber si se resolvió el problema que tenían los campanarios, y tercero, con un dictamen de expertos tendría que decirse si se pueden volver a tocar o no todas las campanas”, añadió.
En tal sentido dijo que “como director de la Comisión de Arte Sacro de la Catedral pido al gobierno federal que se hagan los estudios completos y se emita un dictamen acerca del uso de campanas y de la pirotecnia”.
Al respecto, el ingeniero Roberto Meli, especialista en ingeniería sísmica aplicada a monumentos históricos, que participó en las labores de reforzamiento de ese templo para evitar su hundimiento, dijo que primero se debe realizar un diagnóstico profundo de la situación en la que se encuentra la Catedral Metropolitana.
“Lo principal que necesita es hacer sondeos y mediciones de cómo está actualmente. Las afectaciones que tuvo en el sismo son muy evidentes”, indicó.
Explicó que desde hace 10 años “no se han actualizado los datos que se tenían, por lo que se amerita un estudio a fondo de la estructura actual en cuanto al hundimiento y el deterioro de los materiales”.
Pero, sobre todo, “en cuanto a las inclinaciones de los muros y de las columnas, de cómo han avanzado, en esto hay algunos datos pero muy dispersos y no se ha seguido un monitoreo constante”, explicó.
Destacó que la decisión del toque de campanas de la Catedral Metropolitana depende del gobierno federal, debido a que el inmueble es propiedad federal.
Tanto el Padre Aguilar como Meli coincidieron en que hasta el momento las autoridades del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) no han concretado una fecha para dar comienzo al estudio de fondo.